Gran parte del aspecto exterior actual fue fruto de las reformas que se hicieron a finales de la década de los años 30 del siglo pasado. Esta casa Ayuntamiento está asentada sobre el edificio que antes fue silo del pósito y conservándose del antiguo Ayuntamiento la torre neogótica del reloj. El primitivo edificio tenía su entrada por la calle Real, con un ventanal que daba a la plaza.
El edificio primitivo se quedó pequeño. Así, en julio de 1907, surgió la posibilidad de comprar la casa nº2 de la entonces calle Vega, hoy Tren, ampliando de este modo el viejo Ayuntamiento, formado por un único salón. Ya en la década de los veinte, la necesidad de ampliación se hacía cada vez más necesaria, pues casi todos los funcionarios se encontraban en el mismo local. La Casa rectoral seguía estando compuesta por una única habitación que servía para sesiones plenarias, así como de otras comisiones y juntas locales, estando en la parte alta el archivo municipal. Realmente hacía falta la construcción de un edificio nuevo, es por lo que dos años más tarde se compraría la casa nº 14 de la calle Real, que albergara todos los locales. Nunca se llegó a construir un edificio de estas características aquí, lo que se hizo fue repararlo y acondicionarlo en cierta medida.
A finales de 1931, aún continuaba el Ayuntamiento en el 56 de la calle Real. Poco a poco se desarrollarían obras de adecentamiento en la sala de sesiones y en la entrada, con elevación de la puerta, obras en la escalera que conducía a la parte alta, variación del muro divisorio de los dos cuerpos, así como un cambio en el pavimento. Las diferentes dependencias se repartirían entre el primitivo edificio, en la Plaza del Ayuntamiento, y la casa nº 14 de la calle Real.
En septiembre de 1938, se harían reformas en la Casa Consistorial, obras que se harían en diferentes etapas, para de este modo no entorpecer la marcha burocrática, teniéndose que trasladar las oficinas y dependencias a otros lugares si se quería emprender un total desalojo y reforma a la vez. Un año después, era necesario continuar con estas obras y derribar las estructuras existentes, con la idea de aprovechar los materiales para hacer un nuevo edificio. Así, se trasladaron las oficinas al entonces nº 19 de la calle Real.
La inauguración se haría coincidiendo con las Fiestas de la Santa Cruz, el 3 de mayo de 1941, con lo que un gran número de forasteros se acercaron a visitar el nuevo edificio.
Años después, el 18 de julio de 1955, se inauguró y bendijo un nuevo salón de actos, coincidiendo igualmente con la bendición de las obras de ampliación del abastecimiento de aguas. A finales de este mismo año, se planteó la necesidad de colocar cancelas de hierro en los arcos de la fachada de este edificio, ya que el piso alto carecía de garantías de seguridad, pues se podía acceder a él desde la calle. En enero de 1956 se contrataba con el herrero Ricardo Borreguero Domínguez la construcción y colocación de las cancelas, por el precio de 14.000 pesetas. En marzo ya estaban colocadas las cancelas.
Es de interés citar la torre del antiguo Consistorio de El Viso, situada en la Plaza del Sagrado Corazón e inserta en un edificio de la primera mitad del siglo XX, que sustituye al anterior. Esta torre es de mediados del siglo XIX, de estilo neogótico y con un reloj en el frontal, que da a la plaza.
Actualmente, y tras una reciente restauración del edificio, se encuentra el nuevo Archivo Municipal, inaugurado en noviembre de 2021.